sábado, 10 de noviembre de 2012

YO TUVE UN HERMANO



Yo tuve un hermano
que iba por los montes
mientras yo dormía.
Lo quise a mi modo,
le tomé su voz
libre como el agua,
caminé de a ratos
cerca de su sombra.

pero no importaba,
mi hermano despierto
mientras yo dormía,
mi hermano mostrándome
detrás de la noche
su estrella elegida.


   Ya nos escribiremos. Abraza mucho a Adelaida. Hasta siempre,

Julio

Estos versos, tan conocidos y celebrados, son de Julio Cortázar.
Han ido de mano en mano y de boca en boca desde 1967. Desde la muerte del Che. “Esto es lo que me sale en estos momentos”, dice Cortázar en su carta, y continúa:"la verdad es que la escritura, hoy y frente a esto, me parece la más banal de las artes, una especie de refugio, de disimulo casi, la sustitución de lo insustituible".

Estos versos fueron lo primero que vino a mi mente cuando me enteré por la prensa de la muerte de mi amigo Arturo Muñoz Castellanos, pensando que él también merecía un poema. Pero no es fácil ser Julio Cortázar. Y yo, tener un libro suyo entre mis manos, ha sido lo más cerca que he estado de Cortázar.

A lo más que me atreví fue a publicar en el periódico Hoy Digital de Extremadura un artículo sobre Arturo, desde luego sin hacer caso a Horacio Quiroga cuando aconsejaba de manera clara: No escribas bajo el imperio de la emoción. Déjala morir y evócala luego. Aunque Horacio Quiroga puede que no pensara en aquellas emociones que tardan en apagarse. Ya que el artículo fue escrito ¡casi diez años después!

Esta es la historia de un chico que, con veinticinco años, llevando un cargamento de plasma sanguíneo y medicamentos a un hospital bosnio-musulmán fue herido de muerte en las calles de Mostar, "mientras yo dormía, mi hermano despierto, mostrándome, detrás de la noche, su estrella elegida".

El artículo fue escrito en aquellas calles. Y era más o menos así. ¡Ah!, se titulaba Su corazón Vivo.

"Hoy he entrado por el barrio de Donja Mahala, subiendo por Gojka Vukovica. Ya no conozco estas calles donde cayó. Tenía los brazos extendidos, como dos alas.
 
El 11 de mayo de 1993 se consigue autorización para transportar al hospital musulmán de Mostar un cargamento de plasma sanguíneo y medicamentos y, también, para trasladar a través de la línea de confrontación una serie de civiles no combatientes. Y allá que se fue Arturo. El río Neretva, con su eterno color esmeralda, esperaba paciente, como siempre hizo a lo largo de los siglos, viendo pasar al imperio otomano, al imperio austrohúngaro o a  la victoria partisana tras la II guerra mundial.

 

El convoy que mandaba Arturo consiguió alcanzar el Hospital musulmán, descargar el material en su destino y recoger a un civil herido, todo ello con intensísimo fuego de morteros y fusilería.
El aire se llenó de polvo y arena. Cuando ya empezaban a salir de Donja Mahala, vio a otro civil también herido. “¡Arturo, no podemos recoger a todo el mundo! ¡Vámonos de aquí!”. “A todos los que les podamos ayudar, les ayudaremos”. Así que se decidió a recogerlo.

Como con el vehículo no podía acceder por las barricadas, la destrucción y las trincheras, tuvo que hacerlo a pie. Y lo hizo. Dejó los vehículos a cubierto y se fue por el civil. El fuego continuaba siendo muy intenso.
Cuando regresaba a los vehículos, una de las muchas granadas de mortero que les cayeron durante el trayecto lo alcanzaba.
Aquí. Aquí. Éste es el sitio exacto donde fue herido. Aquí.



Partió con vida para España  y cuando lo llevaron al Hospital Gómez Ulla empezó a repartir un corazón, dos pulmones, dos riñones, un hígado, a todo aquel que pudiera hacerle falta.
Como era de prever su corazón sigue vivo. Ahora me fijo mucho en la gente con la que me cruzo, porque sé que debe distinguirse a la primera cuando alguien lleva dentro el corazón de un valiente".

Así terminaba el artículo.

Siempre que tengo oportunidad recuerdo su historia, aunque sé que, como dice Hölderlin en su poema Recuerdo, "lo que permanece lo fundan los poetas”.

Por eso, creo que por más que la prosa se escriba sobre mármol, sólo los versos durarán. Y pienso que Hölderlin tenía razón y sólo el poema es eterno, pero ése es un don que los dioses entregan a muy pocos; aunque Platón expulsara de su República a los poetas; (tal vez "merecidamente", porque acostumbran a ser poco tolerantes con el poder, que suele tenerlos como compañeros incómodos; y que, como demostró Pessoa, "no son más que fingidores"). Posiblemente por esto último, los versos de Cortázar siempre van acompañados de la carta que le envió a Roberto Fernández: "Y para ti también es esto, lo único que fui capaz de hacer en esas primeras horas, esto que nació como un poema..."


Yo tuve un hermano
que iba por los montes
mientras yo dormía.
Lo quise a mi modo,
le tomé su voz
libre como el agua,
caminé de a ratos
cerca de su sombra.

pero no importaba,
mi hermano despierto
mientras yo dormía,
mi hermano mostrándome
detrás de la noche
su estrella elegida.


   Ya nos escribiremos. Abraza mucho a Adelaida. Hasta siempre,
Julio


Y yo añadiría un fuerte abrazo para Tití.

Las fotografías de Mostar que aparecen en el artículo fueron tomadas en marzo de 1994, por integrantes de la Sección de Suministro del primer Escalón Avanzado Logístico (EALOG I) que servían para Naciones Unidas en Bosnia., a los que yo agradezco su amistad.





15 comentarios:

  1. Como diría mi sabia abuela, que hablaba poco pero con la contundencia de los refranes, nunca es tarde si la dicha es buena.

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    1. Gracias.
      Para refranes me quedo con tu abuela y con El Quijote de Don Miguel de Cervantes.

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  2. Es un pena que uno llegue a París, y ya no pueda soñar que, paseando al atardecer, puede encontrarse con Cortázar.

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  3. Bueno, por lo menos, nos dejó unas buenas instrucciones de "Cómo subir una escalera" y "Cómo darle cuerda al reloj".
    El que lo sabe hacer bien, hace literatura de cualquier asunto.

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  4. ¡vaya! Una vez tuve un alumno, con ojos observadores y hablar pausado, que tenia tu nombre.
    Que alegria saber que tanto tiempo le ha sentado tan bien.

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    1. Bueno..., uno siempre ha confiado en los profesores que lo llevan a uno por las montañas, lo enseñan a montar a caballo, juegan al ajedrez; y, ¡encima!, son amenos en la charla.

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  5. Norbert,
    eres un tío grande.
    Te mando un abrazo
    Joseluis

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    1. Gracias José Luis, sobre todo cuando lo dice alguien que lleva para adelante un periódico y una exitosa web.

      ¿Qué capitán es éste?
      ¿Qué soldado de la guerra del tiempo?

      Lope de Vega.

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  6. Qué bueno es el escritor que sabe emocionar! qué suerte la del lector que lee algo así!

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    1. Gracias.

      De lo que siempre hablamos:
      "La gran necesidad de la Humanidad es el sueño. El mundo debería inclinar su gran cabeza en la primera almohada que le viniera bien y echar un largo sueño."
      Nathaniel Hawthorne.

      Parece que el mundo no ha cambiado y sigue con necesidad de echarse un gran sueño. Espero que ese descanso no lo deje para más adelante. Aunque no hay que ser tan pesimista.
      SIEMPRE TUYO.

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  7. Soy hermano de Arturo. Tanto a mi como a mi familia nos ha llenado de satisfaccion saber que despues de tanto tiempo los hechos heroicos de mi hermano no se olvidan. Gracias

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    1. En Roma a los veintiseis años murió el poeta John Keats. Yace Keats señalado en su lápida como "un joven poeta inglés". Pero a su lado se enterró al pintor Joseph Severn, que quiso ostentar en la suya como título supremo el haber sido "amigo de John Keats".

      Si me preguntan de qué cosas me siento orgulloso relataría muchas y entre ellas pondría: haber sido contemporáneo de Borges, haber sido amigo de Arturo Muñoz Castellanos,haber tenido enfrente en un restaurante de Madrid a García Márquez,...

      Serví con tu padre y serví con Arturo. Gracias a vosotros

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    2. Roberto Lobato Rodriguez.19 de enero de 2013, 14:59

      Mi estimado sr. Ruiz Lima, le felicito enormemente por las hermosas palabras escritas sobre el heroico Teniente D. Arturo Muñoz Castellanos, muerto heroicamente en Bosnia Herzegovina hace casi un año. A dia de hoy a mi personalmente me produce una gran satisfacción hablar de nuestros soldados españoles que a diario defienden con su vida el bienestar y la seguridad de otros. Dicho Oficial estará descansando en un lugar privilegiado para unos pocos escogidos gracias a Dios. Un fuerte abrazo y siga Vd. asi Sr.Ruiz Lima.

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    3. Roberto Lobato Rodriguez.19 de enero de 2013, 15:03

      Perdon por la errata. Donde dice casi un año, quise y quiero decir casi 20 años. Perdon a todos. Un fuerte abrazo.

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    4. Mi estimado señor Roberto Lobato Rodríguez:

      Cuando cargábamos camiones de madrugada, con no poco sudor y polvo, durante muchos meses, nunca perdimos las buenas maneras. Veo que las sigues manteniendo.

      Sé de tus andanzas por Bosnia Herzegovina y por Afganistán. Creo que fueron cinco misiones.

      ¡Hace casi veinte años que te conozco! Han pasado muy rápido, ¿eh?
      Entiendo tu errata.

      Ya sabes que hace casi veinte años íbamos, por la carretera de la costa, a Drâcevo con un ejemplar del Quijote, la segunda parte, (la primera la leímos subiendo montañas) en la mochila.

      ¿Verdad que esta frase era y es preciosa?:

      ”La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierra la tierra ni el mar encubre; por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida, y, por el contrario, el cautiverio es el mayor mal que puede venir a los hombres”.
      (Capítulo 58 - segunda parte)

      Siga Vd. también así, señor Lobato Rodríguez.
      Un fuerte abrazo, amigo Roberto, y gracias por venir. Permíteme esta última licencia porque fueron demasiados momentos juntos.

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